Durante el siglo XIX los escritores que hablan de aventuras en lugares exóticos gozaron de gran popularidad. La dificultad de viajar, la gran cantidad de tiempo que tenían los lectores permitían que los escritores hablaran de sitios lejanos, llenos de misterios, de aventureros que se enfrentaba con otras culturas. Esta semana les traemos cinco libros clásicos de aquellos éxitos de lectores y ventas.
La flecha negra, de Robert Luis Stevenson
A las puertas de la Guerra de las Dos Rosas que enfrentaría a las casas de York y Lancaster, un misterioso grupo está enviado un mensaje amenazador enrollado en flechas mortales. El joven aspirante a caballero Richard Shelton se verá envuelto en mil y una aventuras, en una trama llena de sorpresas, en la que no falta siquiera espacio para el amor, pero dominada por la emoción y el ardor guerrero. Escrita por Robert Louis Stevenson bajo el seudónimo de capitán George North y publicada a manera de folletín, pronto acabó convirtiéndose en un éxito rotundo.
La llamada de la naturaleza, de Jack London
Buck es un enorme y querido perro cruza de San Bernardo y Scotch Collie que lleva una buena vida en un rancho del Valle de Santa Clara con su amo, el juez Miller. Un día, el perro es robado y vendido, con lo cual empezaría su aventura en las partes más agrestes y difíciles del norte del continente. Convertido en un perro de trineo, Buck comenzará a dejar salir su parte salvaje y extrañar cada vez menos su casa. Una novela corta clásica e inspiradora del gran Jack London.
Sandokán, de Emilio Salgari
En este libro se reúnen las primeras historias de Sandokan, aventurero inspirado en el español Carlos Cuarteroni, quien iba haciendo justicia y luchando contra el imperialismo en Sudeste de Asia (principalmente en Borneo, Malasia y la India) a mediados del siglo XIX. Sandokan es un árabe con grandes habilidades para la espada y la navegación. Su creador, el italiano Emilio Salgari no vio un solo peso de sus exitosos libros debido a que su editor le robó casi todo. Pese a eso, la obra de Salgari sigue vive muchos años después de publicada.
La vuelta al mundo en ochenta días, de Julio Verne
El serio y solitario Phileas Fogg abandona su vida de escrupulosa disciplina para ganar una apuesta hecha por sus colegas del Reform Club, en la que arriesgará la mitad de su fortuna comprometiéndose a dar la vuelta al mundo en solo ochenta días. Publicado por entregas en el diario Le Temps desde el 7 de noviembre hasta el 22 de diciembre de 1872, fue de inmediato una de las novelas más celebradas de Julio Verne, más, cuando sabemos, que Verne apenas si salió de Francia durante su vida, describiendo con precisión ciudades y países que nunca visitó ni visitaría.
Las Minas del Rey Salomón, de Henry Rider Haggard
Henry Curtis se embarca al África ardiente para busca de su hermano George, desaparecido en una expedición, cuyo objetivo era encontrar los legendarios tesoros del Rey Salomón. Henry recluta al aventurero Allan Quatermain, el capitán de Marina John Good, ya que sus conocimientos de navegación serán útiles en el desierto. Originariamente se publicó en 1885 y obtuvo un inmediato éxito, que luego ratificarían las traducciones a otros idiomas y las diversas adaptaciones en medios como las revistas o el cine. Allan Quatermain recibió su bautizo como héroe y apareció en infinidad de libros y películas.