El verano es el momento en el que llega el calor y las playas se abarrotan, donde miles de vacacionistas forman caravanas de autos rumbo a los destinos turísticos y también, el momento que mucha gente ocupa para leer esas grandes novelas de muchas páginas que había estado postergando durante meses. Las hay de todos los gustos, las grandes epopeyas rusas estilo La guerra y la paz, pasando por novelas misterio, hasta épicas históricas. Aquí te recomendamos algunas novelas que pueden ser más que leídas, devoradas.
Un pueblo llamado Redención de Hilario Peña
De niño, Cornelio Callahan fue raptado por indios mojaves; de adulto, combate apaches en Sonora, participa en el exterminio de bisontes en Texas y protege la plata de las minas en Chihuahua, todo bajo las órdenes de un terrateniente déspota. Esta novela es una rareza en la literatura mexicana, a ratos relato de aventuras, western por completo, novela histórica y retrato de una época, con pistoleros, caciques y vengadores, Un pueblo llamado redención explora un México oculto en nuestra historia y narra la fundación de una sociedad capitalista en un terreno hostil e indómito.
Crimen y castigo de Fiódor Dostoyevski
Raskolnikov se cree superior al común, más allá de todo castigo, pero su conciencia le recordará que la sangre no se borra tan fácil. Se dedica al hurto, y un día, obligado por las circunstancias acaba asesinando a una víctima que no es tan inocente, pero el asesinato es asesinato y ya. Esta es el libro más famoso del gran maestro ruso, Fiódor Dostoyevski, en la que muchos han prefigurado lo mismo la novela negra psicológica que aparecería más de 50 años después, pero también como los principios del psicoanálisis. Ya sea que sea vista como una historia negra, como un retrato psicológico de un criminal o como una de las piezas fundamentales de la literatura mundial, es un libro obligado para cualquier lector.
Se está haciendo tarde (Final en laguna): Edición conmemorativa de José Agustín
Ambientada en Acapulco, a inicios de los setenta, narra un día solamente en la vida de cuatro personajes un lector de cartas de tarot, un dealer acapulqueño y dos mujeres mayores que ellos. Escrita en Lecumberri, casi en la clandestinidad, José Agustín hizo un corte de caja con su obra anterior e inició una nueva etapa. Esta edición conmemorativa incluye la emblemática novela de José Agustín y una sección con fotos familiares del autor, memorabilia y textos íntimos de sus hijos Andrés y José Agustín Ramírez, de su sobrina Yolanda de la Torres, así como de otros escritores.
Hijas del capitán, Las: Tres hermanas, dos mundos, una ciudad de María Dueñas
Ubicada en Nueva York, en 1936, cuenta la historia de tres mujeres veinteañeras que debido a problemas familiares deben hacerse cargo de un restaurante llamado El Capitán, en medio de una época dura, lejos de su patria. Además de mostrarnos el férreo carácter de las mujeres, Dueñas nos muestra sus dotes como narradora histórica ofreciéndonos viñetas de aquellos años que vuelven real ese periodo. Esta novela aporta una mirada fresca a larga épica del desarraigo, a esos españoles que migraron a Nueva York para buscar una vida mejor de la que tenían en aquella España rural y analfabeta de los años treinta.
Desaparición de Stephanie Mailer, La Dicker, Joël
Samuel Paladin recorre las calles vacías de su pequeña ciudad buscando a su mujer, la encuentra muerta en la casa del alcalde. Jesse Rosenberg y Derek Scott dos policías de Nueva York resuelven con éxito el caso, pero veinte años más tarde, en la ceremonia de despedida de Rosenberg, la periodista Stephanie Mailer le dice que atraparon al asesino equivocado. Días después, Mailer desaparece. Así se inicia este thriller que avanza en el pasado y el presente a ritmo vertiginoso, sumando tramas, personajes, sorpresas y vueltas de tuerca, sacudiendo e impulsando al lector sin freno posible hacia el inesperado e inolvidable desenlace. Joël Dicker ofrece otra gran novela que no permitirá soltarla todo el verano.