Algunos escritores están siempre prestos a hablar frente a un micrófono, algunos buscan ser la portada de revistas o relacionarse con el poder para proyectar su carrera. En cambio, hay otros que se quedan en la sombra, escritores que se recluyen en el anonimato, que no dan entrevistas, que escriben pero no publican. Esta es una breve lista de algunos escritores que prefieren hablen de sus libros que de ellos.

Cormac McCarthy

La leyenda cuenta que McCarthy vive en soledad sobre una plataforma petrolera, que no concede entrevistas y que no le gusta ser fotografiado. Lo cual es medianamente cierto. Se conocen algunas fotos del autor, pero es verdad que no las hay en sociedad, concede entrevistas de manera poco frecuente y siempre se reduce a hablar de libros, aunque de vez en vez hace algún comentario fuera de ellos. La verdad es que Cormac McCarthy pasa sus días en el Santa Fe Institute de Nuevo México. En ese sito dispone de una oficina, donde escribe en una vieja máquina Olivetti y departe entre los científicos que trabajan ahí. Fue invitado por su amigo Murray Gell-Mann, físico y Premio Nobel. Pese a que Harold Bloom lo ha elevado al edén literario, y que ha sido ganador de los dos premios más importantes de las letras norteamericanas, el Pulitzer de ficción en 2006 y el National Book Award  en 1992, casi no fraterniza con sus colegas escritores.

cormac

J. D. Salinger

Famoso por su novela El guardián entre el centeno, que ha sido motivo de culto y de estudio desde su aparición en 1951, y de obsesión en algunas mentes trastornadas como Charles Manson, Lee Harvey Oswald, John Hinckley Jr. y claro, Mark David Chapman. Salinger publicó posteriormente dos colecciones de relatos, primero Nueve cuentos de 1953, luego Franny y Zooey en 1961; y en 1963 una colección de novelas cortas Levantad, carpinteros, la viga del tejado y Seymour: una introducción, protagonizados por la disfuncional familia Glass. Sin embargo, la fama no le acomodó y después de su divorcio en 1967 decidió recluirse y convertirse al budismo zen. Cambió su residencia de New York a Cornish, New Hampshire, donde continuó escribiendo historias que nunca publicó, hasta su muerte a los 91 años de edad. Dejó de dar entrevistas, se negaba a dejarse fotografiar, incluso tuvo un altercado violento con un periodista en el que utilizó su bastón para hacerlo correr. Salinger nunca se sintió a gusto con tanta atención, y esto se acrecentó cuando su hija publicó unas memorias donde no lo dejaba bien parado. Su reclusión fue tal que no se sabe cuántos libros inéditos dejó escritos.

salinger

Thomas Pynchon 

Es curioso que un escritor que implica un desafío su lectura, del cual no se conocen más que algunas fotos viejas, se haya convertido en un ícono pop que incluso salió, con una bolsa de papel en la cabeza, en un capítulo de Los Simpson. Pynchon ha creado una obra muy madura y coherente con su forma de vida lejos de los medios. Los críticos han calificado su forma de escritura como “posmodernismo maximalista”, lo cual implica un barroquismo en su narrativa, además de cientos de referencias de cultura popular. Su novela más destacada, El arco iris de gravedad fue rechazada por el jurado del Premio Pulitzer ya que la consideraron obscena. Pese a todo, ganó el National Book Award y en lugar de recoger el mismo su premio mandó a un comediante. Es un candidato eterno al Premio Nobel de Literatura, pero a él parece no importarle.

pynchon

B. Traven

Al paso del tiempo, lo que se sabe de B. Traven es más y más confuso. Aunque algunos aseguran que es norteamericano y otros, alemán, polaco o austriaco, todo alrededor suyo sigue siendo un misterio. Su biografía, cartas, fotografías y testimonios de gente cercana a él, concuerdan solo en contradicciones. Nació alrededor de en 1882 y es en 1924 que comenzó a utilizar usó los pseudónimos de Maurhut o Marut, con los cuales publicó sus primeros cuentos en alemán. Es en Alemania donde se tiene registradas sus actividades anarcosocialistas.  Pero en 1925 llega a México, en donde adoptó el nombre de B. Traven, no Bruno Traven sino una simple B, que podía significar cualquier cosa. Es en Tamaulipas donde comienza a recorrer y recorrer México y es aquí donde situaría y escribirías sus obras mayores. Cuando comenzó a tener éxito la gente deseo conocer quién era ese misterioso escritor. Algunos manejaron la teoría de que era su traductora, la hermana del presidente  de ese entonces, Esperanza López Mateos. Algunos periodistas, como Luis Spota, le sacaron una foto, que resultó ser de su abogado. Pero el misterio de su verdadero nombre y de su identidad son un misterio. Su esposa Rosa Elena Luján, dice que nunca pudo preguntarle por su pasado, tal vez porque ni él mismo lo conocía.

traven

Elena Ferrante

Elena Ferrante es un fenómeno mundial de ventas. La escritora italiana ha vendido millones de ejemplares y ha sido traducida a varios idiomas. Sin embargo, no existen fotografías de ella, nadie sabe gran cosa de su vida e incluso hay personas que dudan que de verdad exista. Algunos aseguran que es en realidad algún otro escritor o la traductora italiana, Anita Raja. En una entrevista por correo lectrónico dijo: “No me arrepiento de mi anonimato. Descubrir la personalidad de quien escribe a través de las historias que propone, de sus personajes, de los objetos y paisajes que describe, del tono de su escritura, no es ni más ni menos que un buen modo de leer.” Aunque muchos han asegurado saber de quién se trata, la verdad es que a la fecha ninguno de los nombres que se han manejado se ha confirmado.

ferrante